Nos preguntamos el porque de los huracanes, tormentas, terremotos, desbordamientos de ríos, siendo el hombre, el principal culpable de destruir la naturaleza, la cual fue creada, ubicada con exactitud por el Todo Poderoso; pero nos ha quedado grande disfrutarla, sin embargo hablamos de los sueños del ser humano como la modernidad, la tecnología y excusadas en que hay que "evolucionar"; términos más relacionados con devastación, ruina y contaminación, solo por el afán de construir enormes edificios, bodegas y epicentros industriales, proyectos también necesarios para el desarrollo integral de la comunidad, lo que ha faltado es un equilibrio entre la naturaleza, cuidarla, preservarla, hacerla parte del entorno, respetando las leyes establecidas por el gobierno nacional a través del ministerio del medio Ambiente y entes regionales.
Hace unos años veíamos un ejemplo claro con los humedales de los municipios de Funza – Mosquera, cada día más secos, construcciones a centímetros de estos hermosos ecosistemas, la falta de cultura ecológica y de conciencia como seres humanos nos llevó a esto, lo que tranquiliza es el compromiso que están ejerciendo la administración departamental y las alcaldías locales, sabiendo que ya no se puede esperar más tiempo porque es una urgencia mundial o actuar o actuar, ¡no hay de más!, por aquello del "Buen gobierno", ha tocado fibras mas allá de los intereses económicos, apretando las entidades de control por los desfalcos en millonadas invertidas en las fuentes hídricas sin ver ningún resultado, hasta en el mismo gobierno hablan fuerte de este tema, se exige seriedad y responsabilidad con los recursos, como por ejemplo la recuperación de la cuenca del río Bogotá, quien en su época era testigo de paseo de olla y un chapuzón refrescante en sus aguas cristalinas, llenas de trucha, bagre, capitán y otras especies más, aguas respetadas por nuestras sabios antepasados; pero que hoy en día es bastante extraño imaginarse eso y para otros es el impulso de volver a vivir esos bellos momentos...
Dicho río pasa por importantes municipios de Cundinamarca, quienes ya están generando diferentes campañas de prevención y preservación para la recuperación de este gran legado natural, así mismo el Instituto Departamental de Acción Comunal y Participación Ciudadana está planeando un trabajo interesante con las diferentes juntas de acción comunal en el tema "Cultura Ambiental", para fortalecer mucho más el trabajo y compromiso con la comunidad en este tema ecológico mediante capacitaciones, asesorías, campañas y eventos en pro del bienestar general.
Por otra parte, existe un pequeño grupo de interesados preocupados por nuestra tierra, ecologistas, ambientalistas, soñadores naturales, locos del medio ambiente, quienes día a día nos dicen la realidad y en la mayoría de las veces, hacemos caso omiso ha dichos consejos, ojala esa locura de rescatar esa inmensa riqueza natural se nos pegara a todos, locos porque nuestros hijos o las futuras generaciones respiren un aire puro, chiflarnos para que ellos y quizás nosotros alcancemos a bañarnos en el río Bogotá, mostrar con orgullo algo que recuperamos entre todos, ¡que locura pero que necesidad tan agobiante! lo bueno, estamos a tiempo para contribuir desde donde estemos, gastemos el agua necesaria, utilicemos bombillos ahorradores, arrojemos la basura en su lugar, exijamos los comparendos ambientales, bueno, tantas acciones que nos benefician a todos y ¿usted que haría para unirse a este propósito? cuéntenos...