La participación activa y espontanea de los niños y jóvenes en los
eventos culturales ratifican su interés por lo nuestro, solo falta creer un
poco más, la muestra clara es las ganas de representar con altura una danza
tradicional colombiana que evoca nuestros campesinos, lo hacen de tal manera
que renacen nuevas propuestas, en donde ellos mismos recrean situaciones mucho
más alegres, dándole un colorido y una fuerza que motiva a los espectadores, y
es cuando hago un alto en el camino mi respetado lector, preguntando él porque
se prejuzga al niño o a la jovencita y lo peor se concluye que a nuestras
nuevas generaciones no les gusta lo nuestro, bueno, igual el anhelo es que sea
la gran mayoría, es un porcentaje bajo frente a lo habitual, de todos modos
son, los pequeños artistas los gestores y las chispa adecuada para encender
este interés en sus cercanos de su misma edad, además es emocionante cuando
vemos una presentación en donde se mezcla la experiencia del adulto y la gracia
del adolescente.
En la parte musical colombiana existe un gran panorama de nuevas
propuestas que hay si podemos confirmar con hechos, datos y estadísticas que NO
les interesa promocionar al a mayoría de medios de comunicación porque, y me
atrevo a decir, les marca todavía el complejo que lo de afuera es mejor; sin
embargo seguimos en esta hermosa tarea del Periodismo Cultural, sensibilizando
a todos para que busquemos posibilidades de apreciar lo nuestro, y retomando lo
musical los invito a que escuchen Guafa Trío, Choquibtown, María Mulata, Puerto
Candelaria, Filin Trío, entre más de 500 grupos de niños y jóvenes que
preservan nuestra música con nuevos sonidos, en mi grupo en Facebook
disfrutaran de sus videos COLOMBIA CULTURAL.