Alcalde de Funza, Manuel Antonio Montagu participando en el ceremonial con las Autoridades Muiscas de Cundinamarca |
Nos encontramos en un momento
coyuntural hablándolo desde el reconocimiento histórico de nuestros municipios
a partir de las comunidades indígenas, es curioso saber que tenemos
maravillosos pueblos con su nombre muy Muisca otros panche; pero se destaca o les
celebran años desde la destrucción española, municipios que ya existían,
desconociendo automáticamente lo que pasó hace más de 500 años atrás, claro
está que debemos tener en cuenta la enseñanza de la historia de nuestro país,
la cual se soportó por casi 300 años en autores españoles que por supuesto
hablaron bien de sus “conquistas” , despreciando todo lo que habían encontrado
en nuestro continente, información repetida de generación en generación por eso
tanto desarraigo y falta de identidad por sentir esa vergüenza que nos contaron
de nuestros antepasados; lo bueno de todo, es que salen a la luz pública nuevas
investigaciones que aclaran la inmensa riqueza social y cultural de nuestros
antepasados, como por ejemplo Funza, se reconoce nuevamente como la capital
Muisca de Cundinamarca, siendo la primera Bogotá y por consiguiente la ciudad de los Zipas, los
jefes supremos de los Muiscas, Muyquyta su nombre más antiguo y a la llegada de los
conquistadores se denominaba Bacatá, siendo también el lugar más destruido y
saqueado; dicho reconocimiento realza el patrimonio ancestral de todo el
territorio, lo que quiere decir que Funza alza la cabeza de su historia y eleva
aún más el rico pasado de los municipios que hicieron parte de su dominio como
Mosquera, Madrid, Facatativá, Bojacá, Zipacón, Tabio, Tenjo, Cota, Chía,
Cajicá, Tocancipa, Zipaquirá, Suba, Bosa, Usme, Soacha, entre otros, quienes
conformaban el Zipasgo más importante de la región y por lo tanto mantiene una
herencia indígena que data más de 800 años de existencia para conocerla y valorarla, herencia
Cundinamarqués.