Emisora Encarretaos

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Funza desde una mirada Cultural.


Reflexiones Culturales.

Quiero agradecerles a mis lectores por seguirme con mis escritos y por proponerme este tema que es de interés para todos, Funza desde una mirada cultural, teniendo como base los últimos 12 años y un poquito más atrás...
“Vecino buenos días”, aún se escucha esta bonita y culta expresión, es tan pegajosa que hasta los recién llegados al municipio la usan, para otros “los vecinos o familias de toda la vida, se nos han ido, que lastima”, apellidos reconocidos por diferentes factores se extrañan por las calles de Funza, y que hablar de aquellos locales memorables: Las Posadas, Las Melo (refiriéndome a la antigua en el parque), almacén Pebbles, el almacén de zapatos Galicia (de mi señor padre Q.P.D.), en donde de niños jugábamos a salir por una puerta y salir por la otra, Almacén La Capilla de Don Álvaro también ya fallecido o la Garantía, o donde las señoritas a comprar cocadas de 5 pesos, la ventanita de los Martínez, o aquellos barriles repletos de lentejas y frijoles en la Placita y en fin, un sin número de lugares inolvidables. El colegio Comercial, el Inmaculado, el Marqués, etc., que hacen parte de nuestra historia y nuestra cultura.
Por otra parte, haciendo un recuento desde los eventos como tal, Funza fue epicentro de las ferias equinas más importantes del país, logrando el anhelado grado B, las fiestas de salón se disfrutaron en las grandes haciendas del municipio y sus asistentes fueron de corte presidencial, además, por supuesto años más adelante, surgieron esfuerzos independientes organizando certámenes que se recuerdan como el festival folclórico de la Sabana de Don Canro y del Vallenato con grandes cantantes de este género, (de pronto por esto es que los últimos Zaquesazipas son tan vallenatos, de pronto), otros esfuerzos como la travesía 720 minutos que aún se mantiene, el festival de la Faqua, entre muchas propuestas aisladas pero valiosas en el esfuerzo de adaptar espacios culturales.
Sin embargo es importante tener en cuenta el cambio de la entidad cultural del municipio en el transcurso del tiempo, la cual dependía en todo sentido de la administración municipal, paso a ser un ente descentralizado con muchísimas ventajas, gracias al trabajo de Liz J. López (actual concejala) y su equipo de trabajo, con pocos escenarios construidos, alquilando tarimas y carpas; pero eso sí, con una amplia oferta cultural de todos los días, adaptando calles, esquinas, parques y avenidas para ofrecer una programación para toda la familia, logrando competir sanamente con una de las mejores casas de cultura del país, (la de Tocancipa que aun se mantiene con el mismo empuje),  posteriormente se destaca la entrega del Teatro al Aire libre echo en el gobierno de la Alcaldesa Beyanith, aprovechado en la administración Vargas con sin número de proyectos, rescatando y a la vez preservando la estructura dejada desde 1998, sin embargo llega una propuesta de Ciudad, la cual dejo una importante infraestructura para darle una vida cultural a Funza totalmente activa; pero también se sintió un vacío en el afán de reunir masivamente de vez en cuando al público en general, convirtiéndose más en certámenes con un corte más comercial, dejando de lado lo tradicional, y para no ir más allá  el resultado es la reacción del actual público cuando se presenta un dueto o grupo de música tradicional colombiana, dándome vergüenza ajena por que se rechifla o se expresa palabrotas para que cambien de artista porque el interés prima en el que está “sonando en los principales medios de comunicación”, preocupante y la vez un gran reto para el actual director de cultura, trabajar y volver a reunir un público tolerante y educado a todas las manifestaciones culturales, ¡qué bonita tarea! para que saque a relucir su experiencia, dinamismo y dedicación por este maravilloso campo del arte y la cultura, la cual exige alma, corazón y sombrero.
Gran compromiso de Avanzar por una sociedad funzana acostumbrada a tener artistas de renombre; pero también con una mente abierta a conocer y apreciar lo tradicional, lo que nos hace colombianos, nacidos o no, amantes a la danza tradicional, a los ritmos campesinos, a lo nuestro, porque es una necesidad departamental y nacional latente, el fenómeno de lo extranjero nos está absorbiendo y lo comercial está negando nuestra identidad, es un trabajo social por nuestros niños y jóvenes,  sin dejar de lado lo que le gusta a la comunidad, es simplemente un equilibrio para llegar a vivir una ciudad desbordada de Vecinos amables, tolerantes a la diferencia y defensores de su terruño cultural.

¡Atentos al Festival Encarretaos!

  Gracias por estar al tanto de nuestro Festival Encarretaos III y no nos cansaremos de repetirlo, contamos con una nómina increíble de arti...